Cecilia, amiga entrañable y ex-Greenpeace me envía sus fotos de la protesta “Sin Piel España” en Barcelona.
La protesta en la que participó mi amiga fue organizada por “Anima Naturalis” y buscaba concienciar a los ciudadanos de que por cada abrigo de piel que se fabrica hay que matar a unas 100 chinchillas, algo que, a su juicio, no está justificado en ningún caso, pues hoy en día existen otros tipos de materiales que sirven de abrigo.