Los cuerpos caminan en la oscuridad. Sus manos torpemente tantean los espacios que no conocen ni perciben.
Los ojos están abiertos pero nada ven.
El tiempo pasa. La oscuridad es ya penumbra. Se distinguen las sombras, pero eso no evita que los cuerpos tropiecen, se choquen, se golpeen, caigan.
Los cuerpos ven una luz.
Un túnel de luz los invita y se acercan. En ese momento, logran ver todo lo que siempre les resulto conocidamente desconocido.
Ya es tarde.
Entraron al túnel.
Estaba aburridíma, y me puse a chusmear tu página desde tus inicios… Felicitaciones!!!, vas mejorando!!.. de todos modos este poema me hizo acordar muchisímo a uno que escribió un amigo que se llama Fernando Israilevich (el mismo que escribió contienda y que lo posteaste hace un tiempo), este pibe es de Córodba capital; el jueves que viene toca con su banda en Mil Demonios, trae aparte el nuevo libro que saco que se llama “Los valores no son verso”. En fin, aca va el poema…
Sexo
Un cuarto en penumbras
Un cuarto encerrado
Cual rauda brazada
Del ya casi ahogado
Como por reflejo
Se enciende el pecado
Se abren los labios
Se mojan las manos
Se gime el silencio
El aire jadeado Serozan las partes
Se erizan los dedos Eléctrico tacto
Calor desbordado Y tocan y tocan
Los torsos sudados Las manos más fuertes
Los muslos templados Las palmas de nube Los muslos delgados
Emanan saliva Seanegan los vados Se llenan los ojos De elixir salado
InvadeelahogoloscuerpostumbadosPorsolouninstantevacíollenadoexhalan yentonces
Se calma el espasmo.
Y aunque pareciera
Que están enredados
Las manos que tocan
Son sus propias manos
El tiempo es el mismo
Más no el mismo cuarto
Él ya no llama
Ella no ha llamado.
Espero que te haya gustado. Besotes y seguiré chusmeando!!!
Dani.-