“Soy igual que los tipos que venden cigarrillos o autos. Sus productos matan más gente al año que los mios. Al menos los míos tienen un dispositivo de seguridad”.
Con esta frase explica Yuri Orlov, el protagonista de la película “Lord of War” interpretado por Nicolas Cage, como despegarse de la responsabilidad por la sangre generada por sus negocios.
La historia que muestra como los valores morales y éticos pueden ser adaptables a las variables económicas. Un tipo que se ubica en los negocios y la política internacional sólo por su coraje y astucia para realizar los tráficos más variados y que en el seno familiar podía ser el más pacífico padre y esposo.
Lo importante es entender que estos tipos son solo piezas del juego que los países más poderosos tienen entre manos, en la competencia de ver quienes proveen de armas a todos los conflictos en países desarrollados, que no solo aprovechan sino que también promueven de acuerdo a sus intereses.
No pude evitar recordar el día que yo me crucé con uno de estos siniestros mercaderes de la muerte. Un día por las calles de Morón, me crucé con Monzer Al Kassar, traficante de armas, amigo de Menem y que fue quien armó la Operación NADIA que tuvo por objeto exportar 7180 tns. de armamentos a Croacia.
Trabajando en “El Diario” de Morón, nos avisaron que en el bar ubicado frente a la municipalidad estaban Rousselot (el intendente de Morón) , Monzer Al Kassar, y Alberto Samid (El Rey de la Carne). Mandamos un fotógrafo pero la reunión había terminado. Nos perdimos la foto. Minutos después, en camino a mi casa, me topé con Al Kassar en una calle paralela a la del bar. Lo miré a los ojos y el devolvió la mirada en forma desafiante.
Obviamente no sabía quién era yo, ni le importaba. Su mirada fria y despectiva duró unos segundos. Los sufientes para que entendiera que a esos tipos no hay que mirarlos a los ojos.
Si te interesa detener a estos tipos y a los gobiernos que promueven el tráfico mundial de armas por favor ingresá y participá de Control Arms. Esta iniciativa de Amnesty, Oxfam y Iansa ya reunió más de 960.000 peticiones de personas de todo el mundo.
La dirección en español es http://www.controlarms.org/es/index.htm
Concuerdo en todo lo que decís Hernan, menos en eso de no mirar a ese “tipo” de gente a los ojos. Creo que sí hay que mirarlos a los ojos, por que son ellos los que tienen cosas que esconder, son ellos los que mienten, son ellos los que huyen. Son ellos los que tienen que bajar los ojos, ante ellos nosotros no tenemos por qué bajar la vista, que la bajen ellos! nosotros tenemos la conciencia tranquila.
Perico Perez Aguirre se cruzó una vez con uno de sus torturadores y no solo no bajó la vista sino que lo saludó, el torturador humillado bajó la vista y apuró el paso.
Tan hijo de puta, que aun se anima a mirar a la cara a alguien. Estoy dea cuerdo con Agustinz, son ellos lso que deben bajar la cabeza…bah en realidad ni los tendriamos que cruzar en la calle, tendrían que estar presos.