Homero trata de votar a Obama (y el maravilloso sistema democrático norteamericano no lo deja)

En el Blog de ¿Cual Es? encontré este video de Los Simpsons donde se critica abiertamente a Dieblod, la empresa que, desde 2002, se ocupa de las máquinas de votación de ese país.

La compañía está vinculada al partido republicano hasta el punto de haber colaborado con fondos a la campaña del actual presidente George W. Bush, según publicó 20minutos.es.

El Complot de las Torres Gemelas

Para todos aquellos que como yo disfrutan leer sobre teorías conspirativas sobre aquellos hechos cuyas historias oficiales nunca nos tragamos, les recomiendo leer esta nota de Juan Gelman sobre el ataque a las Torres Gemelas.

Vía Flickr

Entonces, ¿cómo fue?

Son notorias las mentiras que la Casa Blanca fabricó para justificar la invasión y ocupación de Irak. Los perio-distas/investigadores Charles Lewis y Mark Reading-Smith descubrieron que W. Bush y siete otros jerarcas de la Casa Blanca propalaron al menos 935 mentiras en los dos años que siguieron al 11/9 y precedieron a la invasión de Irak. Cabe reconocer que el más prolífico en la cuestión fue el presidente W. Bush: 232 declaraciones falsas sobre el presunto arsenal de armas de destrucción masiva en poder de Saddam Hussein y 28 acerca de la supuesta relación del autócrata con Al Qaida y con los atentados. Le siguió el entonces secretario de Estado Colin Powell: 244 y 10, respectivamente. El vice Dick Cheney, Condoleezza Rice, Donald Rumfeld, Paul Wolfowitz, Ari Fleisher y Scott McClellan también aportaron a este arsenal masivo de falacias (www.publicintegrity.org, 23-1-2008). Al parecer, no otra cosa sucedió con la versión oficial de los atentados mismos.

El Comité de Justicia del Senado estadounidense ha concluido un nuevo informe en torno de las fallas que impidieron frenarlos: echa la culpa al FBI, señala que había amplias evidencias de que se preparaba un ataque en suelo de EE.UU. y que jefes del organismo de espionaje las bloquearon (The New York Times, 28-8-08). Pero hete aquí que casi 800 personalidades –catedráticos, arquitectos, ingenieros, altos funcionarios, políticos, ex espías, pilotos y sobrevivientes de las Torres Gemelas– echan por tierra las dos cosas: la versión oficial y el informe del Senado (www.reopen911.info). Véanse algunos testimonios.

Los sobrevivientes, en primer lugar. Personal de las Torres que se encontraba en el subsuelo B1, ubicado a 330 metros debajo de los pisos 93 a 98 donde impactó uno de los aviones, sintieron que “vibraba el suelo, las paredes comenzaron a resquebrajarse y todo temblaba”, declaró William Rodríguez, empleado de mantenimiento: era una explosión que venía de subsuelos inferiores. Segundos después, Rodríguez escuchó el estallido de arriba y supo luego que se trataba de la embestida del Boeing 757 contra el edificio, en tanto Felipe David, compañero de tareas, irrumpía con quemaduras graves en el rostro y los brazos gritando “socorro”. Anthony Saltalamacchia, supervisor del servicio, escuchó al menos diez explosiones procedentes de abajo antes de salir de la trampa. Los testimonios coinciden, pero ninguno fue tomado en cuenta en el informe del Senado.

Los pilotos consideraron imposible que un avión se haya estrellado contra el Pentágono. Señalaron que el agujero en el muro es más grande que el que podría causar un 757 y estimaron inverosímil que éste se deslizara luego durante 10 segundos en el césped del interior, como muestra una filmación oficial. El comandante (R) de la Marina Ralph Koistad, piloto de combate con más de 23.000 horas de vuelo, reflexionó: “¿Dónde están los daños provocados por las alas del avión en el muro del Pentágono? ¿Dónde las 100 toneladas del Boeing, los grandes fragmentos del aparato que siempre se proyectan lejos del lugar del accidente? ¿Dónde están las partes de acero de los motores, dónde el tren de aterrizaje, que es de acero?” (www.vigli.org/PDF911). En efecto, no estaban, ni un solo desecho se encontró dentro o fuera del Pentágono.

Los pilotos subrayaron otro aspecto: las maniobras de los aparatos que chocaron contra las Torres eran impracticables. Del capitán (R) Wittenber, con 35 años de experiencia en la fuerza aérea de EE.UU. y en varias líneas comerciales: “No creo posible que un presunto terrorista entrenado en un Cessna 172 entre en la cabina de un Boeing 757 o 767, pueda hacerlo volar vertical y horizontalmente y lograr virajes de 270 grados a gran velocidad, el avión sería incontrolable. Es ridículo pensar que un aficionado pueda ejecutar esas maniobras manualmente. Yo no podría hacerlo y soy absolutamente formal: ellos tampoco”. Los testimonios de unos 500 ingenieros civiles y arquitectos confirmaron desde sus especialidades que la versión oficial de los atentados “es un cuento de hadas” (John Lear, piloto comercial, 19.000 horas de vuelo).

El arquitecto Frank De Martini y otros afirmaron que la solidez de las Torres tornaba inimaginable que se derribaran sólo por el choque de un avión. “Fue claramente el resultado de una demolición controlada y programada para que se produjera en medio de la confusión imperante”, manifestó el ingeniero Jack Heller. Esa clase de demolición no se improvisa. Sus autores, ¿sabían previamente con exactitud el día y la hora de los atentados?

Pareciera que sí.

Diferentes organismos de profesionales exigen que se investigue a fondo la tragedia que costó la vida de casi 3000 trabajadores. Para el piloto Glen Stanish, se trató de “una operación interna, concebida, organizada, cometida y controlada por un grupo muy vasto de criminales en el seno de nuestro gobierno federal de EE.UU. Utilizada como una razón falsa, un pretexto, una mentira, para invadir dos países extranjeros ricos en recursos naturales, para extender un imperio, para modificar las fronteras de los países del Medio Oriente y como elemento de la ‘guerra antiterrorista’ o, mejor dicho, de la guerra contra la libertad”. Hay más de cien periodistas y artistas que piensan lo mismo. “Nunca creí la historia de la destrucción de las Torres Gemelas el 11/9”, selló Sharon Stone (pdf.lahamag.com, 2-08). Que algo sabe en materia de historias.

“Una parte de la población del mundo, la que está por debajo de la línea de pobreza, está sufriendo mucho las consecuencias del cambio climático"

Entrevista a Cecilia Ugaz, experta en Economía y Desigualdades sociales del Programa de las Naciones.

Fuente: Agencia CyTA-Instituto Leloir. Por Claudia Mazzeo

Las imágenes de televisión no dejan espacio para las dudas. Los efectos del cambio climático castigan a la población mundial de manera despareja y son los países pobres quienes se ven más afectados por la acción de fenómenos como huracanes, inundaciones y sequías, los que asolan cada vez con más frecuencia e intensidad.

El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) publicó un informe sobre Desarrollo Humano 2007-2008, denominado “La lucha contra el cambio climático: Solidaridad frente a un mundo dividido’ en el que advierte que el mundo avanza hacia un “punto de inflexión” que podría atrapar a los países más pobres y a sus ciudadanos más vulnerables en condiciones de desventaja, cada vez peores, y dejar a millones de personas enfrentadas a la malnutrición, a la escasez de agua, a amenazas ecológicas y a pérdidas irreparables en sus medios de vida.

Los datos revelados en el informe indican que entre los años 2000 y 2004, 262 millones de personas resultaron afectadas por desastres climáticos; más del 98% de ellas vivían en países en desarrollo.

En los países pertenecientes a la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), uno de cada 1500 habitantes ha sido afectado por un desastre climático, mientras que para los habitantes de los países en desarrollo la proporción es de uno cada 19.

“El cambio climático representa una amenaza para toda la humanidad. Pero son los pobres, que no tienen responsabilidad alguna por la deuda ecológica que estamos acumulando, quienes enfrentan los costos humanos más graves e inmediatos”, señala en el informe Kemal Derviþ, administrador del PNUD.

El estudio, que es fruto del trabajo de varios grupos de especialistas, subraya, asimismo, las extremas desigualdades en cuanto a las capacidades de adaptación que presenta la población mundial. Mientras los países ricos invierten grandes sumas en sistemas de protección contra el cambio climático y sus gobiernos desempeñan un rol fundamental en estas actividades, en los países en desarrollo “los pobres del mundo, con sus escasos recursos, tienen como única alternativa nadar o hundirse”, sostiene en el trabajo Desmond Tutu, Arzobispo Emérito de Ciudad del Cabo.

Esta situación crea un “mundo de apartheid” en materia de adaptación. Pero no todo es desesperanza. El cambio climático brinda también al mundo una oportunidad: la oportunidad de unirse para dar una respuesta común.

“Si el mundo reacciona hoy será posible mantener durante el siglo XXI el aumento de la temperatura mundial dentro del umbral de los 2°C por encima del nivel de la época preindustrial. Lograr esto requerirá un elevado nivel de liderazgo y cooperación internacional sin precedentes”, afirma el estudio del PNUD.

Para conocer más sobre la importancia del informe del PNUD, “La lucha contra el cambio climático: Solidaridad frente a un mundo dividido’, la Agencia CyTA entrevistó a Cecilia Ugaz, doctora en economía, subdirectora y editora del informe “La lucha contra el cambio climático: Solidaridad frente a un mundo dividido. La entrevista tuvo lugar en el marco del seminario sobre cambio climático, organizado por InfoSud y la red internacional de periodistas Media 21, en Ginebra, Suiza.

– A su juicio, ¿qué es lo más importante de informe, ‘La lucha contra el cambio climático: Solidaridad frente a un mundo dividido’? ¿La información recabada o que se logre mayor conciencia sobre las implicancias del cambio climático?

Lo que a mi me da mayor satisfacción de ese trabajo es tener la oportunidad de poner en claro, con datos concretos, que existe una gran desigualdad frente al cambio climático y que nosotros los ciudadanos tenemos que ser muy concientes de ello. Hay una parte de la población del mundo que está sufriendo muchísimo y que no tiene voz y creo que nosotros, con ese informe, somos un poco la voz de ellos. Es la gente que sabemos que está viviendo bajo la línea de pobreza, que está sufriendo los efectos del cambio climático ahora, y en adelante, ellos y sus hijos. No tienen quien presente su caso y nosotros estamos, de algún modo, haciéndolo.

-¿Cuál es el próximo paso, luego de la publicación del informe?

Es seguir presionando, sobre todo a nivel político. Estamos tratando, por todos los medios, de lograr influenciar lo más posible a los gobiernos, a nivel del parlamento. A nivel nacional actúa el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) dentro de su parte programática, y trabajando a nivel país, pero creo que también está el área de derecho internacional, de tratar de hacer los vínculos con los otros regímenes que existen, como el régimen de los derechos humanos. Creo que eso puede dar todavía mucha más fuerza a todo el proceso de cambio que se necesita para poder evitar las consecuencias catastróficas del cambio climático.

-¿Cree que es importante que el cambio climático sea vinculado con los derechos humanos a nivel de los organismos internacionales? El agua ha sido definida como un derecho básico en ese contexto, pero ¿ha cambiado algo?

Ya se consiguió que el cambio climático sea considerado un aspecto de los derechos humanos. Lo importantes es cómo dar contenido a ese concepto, cómo incluirlo en las políticas a fin de lograr evitar que se produzca una violación de los derechos humanos. Sin duda tenemos que trabajar en las políticas. Pero sin el marco normativo no es posible.

Creo que los aspectos políticos y normativos deben ir de la mano. Para que un ciudadano pueda exigirle a su gobierno el cumplimiento de sus obligaciones, estás tienen que estar explicitadas.

De lo contrario, ¿cómo exigir? Puede entonces parecer, sobre todo al principio, una declaración de intención. Y como decimos “el camino del infierno está lleno de buenas intenciones”. Pero creo que el marco normativo es importante y no nos podemos quedar allí. Eso también es parte de la batalla. Tenemos el derecho establecido, ¿ahora qué hacemos para que se cumpla? No disponemos de un sistema de rendición de cuentas, y eso tenemos que ponerlo como una piedra angular.
A partir de allí, debemos movernos en términos de políticas para poder exigir que esas políticas se cumplan.

-¿A quiénes cree que hay que implicar verdaderamente para que el cambio climático, la contaminación, la deforestación, la desertificación sean en verdad tomadas en cuenta. ¿Qué es necesario primero? ¿La conciencia social o el cambio político?

Lo primero es el nivel político. Creo que los políticos antes que nada tienen que darse cuenta que ellos también son ciudadanos, no somos esferas separadas. Ellos tienen la posibilidad de decidir. Desafortunadamente en este momento el cambio climático se ve como una cosa tan lejana según nuestros horizontes de tiempo, que parece que en nuestra vida útil nunca va a pasar nada, y que además poco podemos hacer.

Porque las decisiones que tomamos ahora en términos de energía, de consumo, son decisiones que van a tener muchas repercusiones en el futuro, a mediano y largo plazo. Entonces creo que hay que comenzar por la esfera política y hacerles saber que los costos, aunque parezcan enormes desde el punto de vista económico, no lo son en realidad.
El costo de no actuar es cinco veces mayor que el actuar. Eso está medido, ha sido probado.

– ¿Sigue aún vigente el concepto de que los países pobres no pueden darse el lujo de pensar en el cuidado del ambiente?

Lo que parece un ahorro ahora, va a ser un costo enorme después. Y hay daños que son irreparables. La vida humana es irremplazable. No se cuenta en términos de 1, 2 o 4 millones. Una vida cuenta. Entonces eso es lo que tenemos que fijarnos. Eso también es el enfoque de derechos y de desarrollo humano. Una persona cuenta. Y en la medida en que haya una sola persona que sufra la violación de sus derechos humanos esa persona nos tiene que importar a todos. Tenemos que evitar el error de hablar en abstracto. De considerar únicamente números agregados, cifras promedios, datos globales.

-Sobre ese cambio de actitud que menciona que debe producirse entre los políticos, ¿qué papel estima que juega la sociedad civil?

Un papel importantísimo. Creo que el mundo actual está centrado en el conocimiento y la comunicación. Así es el siglo XXI. Y siento que de alguna manera hemos heredado taras de la Edad Media. Que somos un grupo de elegidos, que sabe, que entiende, que ha estudiado, y que se comunica las novedades entre ellos, transmitiendo al resto lo que más le conviene, en el momento que quiere.

Creo que precisamente el rol de la sociedad civil, y de los medios de comunicación en particular, es democratizar el conocimiento. Siento que la ignorancia es un lujo que no nos podemos permitir. No es humano, no es justo y es extremadamente inigualitario. Todos tenemos la obligación de bajar al llano y decir lo que sabemos sobre lo que va a pasar; hasta el premio Nóbel debe hacerlo. Tenemos que ser capaces de comunicarnos de una forma simple.
Porque hoy parece que hay que tener un doctorado hasta para leer un recibo de la luz. ¿Qué es lo que me pasa? Yo misma leo mi recibo de la luz y no entiendo nada. No puede ser. Creo que está puesto a propósito de modo complicado para que nadie entienda. Y como no se entiende, la gente no tiene tiempo, cada vez corremos más, y entonces no hay reclamo. Ha llegado el momento en de democratizar el conocimiento y la información y eso tiene que ser patrimonio de todos, es un bien público.

¿No cree que hay un discurso, disociado en los hechos, que alcanza a científicos y políticos por igual, sobre la importancia que tiene la comunicación en la vida diaria?

Se menciona con mucha frecuencia la necesidad de informar, pero no se ven iniciativas tendientes a sumar comunicadores a los grupos de investigación o a las áreas de trabajo relacionadas con la política. Es cierto. Hay todavía una cuestión muy elitista según la cual, el conocimiento le pertenece sólo a unos cuantos.

Creo que también hace falta empujar en ese sentido. La comunicación debería ser parte de la estructura curricular de toda disciplina, fuera la que fuere. Para ello, es necesario tener un concepto muy claro de por qué es importante la comunicación y de que eso también es parte del aprendizaje.

Porque de lo contrario, me pregunto, la investigación ¿para quién la haces? ¿Para ti y para tus colegas? ¿O la estás haciendo porque realmente tienes una intención de cambiar el mundo? Todos tenemos que estar concientes de que el mundo tiene que cambiar. Para ello, tenemos que cambiar todos individualmente. El fenómeno del cambio climático nos da la oportunidad de saber que no basta con producir modificaciones a nivel local. El cambio real requiere de la participación de todos.

Mijaíl Gorbachov


En la revista Esquire le hicieron una entrevista a Mijaíl Gorbachov del que extraje alguna citas interesantes:

  • La confianza existe cuando no hay lugar para mentir.

  • Hay que considerar que Reagan era veinte años mayor que yo. Tenía la edad de mi madre. Por lo tanto, existía una brecha generacional. Durante una de nuestras conversaciones, intentó darme lecciones morales. Yo le dije, “Señor Presidente, usted no es mi maestro, y yo no soy su alumno. Usted no es un fiscal, y no soy un acusado. Vamos a hablar con franqueza y vayamos al grano. Si quieres dar lecciones, podríamos terminar acá porque no hay nada que hablar. Se molestó un poco. No mucho después me dijo, “¿Por qué no vamos paso a paso? Usted me llama Ron y yo lo llamo Mikhail”. Ese fue un paso muy importante.

  • Los miembros del club nuclear no son un buen ejemplo para otros países. Insisten en que otros países no puede desarrollar armas nucleares, mientras que al mismo tiempo que se esfuerzan por perfeccionar sus propios arsenales nucleares.

  • Las armas nucleares deben ser abolidas.


Y sobre todo recomiendo recordar este último pensamiento teniendo en cuenta la situación actual de las relaciones internacionales:


  • Los políticos en los Estados Unidos actúan a veces de una manera que parece irrespetuosa hacia nuestro país y nuestro pueblo. Los rusos son personas que valoran su dignidad. Es mejor no generar problemas con eso.

Obama y un vicepresidente por SMS

Al final Obama encontró la respuesta a la pregunta que muchos nos hacíamos: ¿Para que sirve un vicepresidente?

Para testear una pionera y exitosa estrategia de mobile marketing político

El candidato demócrata para la presidencia de Estados Unidos, Barak Obama, sigue sorprendiendo con de las nuevas tecnologías en su campaña y esta vez aprovechó el anuncio de su compañero de formula para hacer historia en la utilización del SMS como herramienta política.

El primer mensaje fue un teaser para generar expectativa y un efecto viral que decía: “Barack anunciará su elección de vicepresidente a través de un SMS en cualquier momento a partir de ahora y hasta la convención. Decidle a todos que envíen VP al 62262 para que seais los primeros en enterarse. Reenvíalo”.

La primicia luego se dio, tal como se había prometido vía SMS: Barack ha elegido al senador Joe Biden como nuestro candidato a vicepresidente. Pasá el mensaje!“.

Según un informe de la consultora Nielsen, el mensaje habría sido envíado a casi 3 millones de personas. El informe también destacan al SMS como “medio de comunicación masivo a tener en cuenta en campañas electorales o de marketing” ya que en Estados Unidos más de 116 millones de personas utilizan activamente la mensajería de texto.

El mismo informe aseguró que “el mensaje de texto de Obama se convirtió en uno de los más importantes alguna vez enviados, y una de las más importantes campañas de promoción utilizando medios móviles”.

Otra Guerra

En la foto dos ancianos de Georgia lloran el cadáver de un pariente poco después del cese de un bombardeo. (Foto: Gleb Garanich/REUTERS). Hace unas horas Georgia declaró formalmente la guerra a Rusia.

Estoy enojado y decepcionado. Cuando parecía que, con Obama, se venía el fin de la ofensiva asesina de EEUU por el mundo, y con eso tiempos más tranquilos por el mundo, se lanza una nueva guerra justificaba por ansias independentistas.

Los juegos olímpicos, que deberían ser un lugar de confraternidad mundial fueron testigos hoy de la partida de los deportistas de Georgia como protesta por la ofensiva rusa.

No aprendemos más. Parece que la única respuesta que nos queda es unirnos todos al “movimiento por la extinción humana voluntaria”.

¡Es el petróleo, idiota!

Un artículo de Noam Chomsky publicado el 8 de julio que traduje para Listao.

La versión original en inglés pueden verla haciendo click aquí.


El acuerdo que está tomando forma entre el Ministerio de Petróleo de Irak y cuatro empresas petroleras occidentales plantea preguntas críticas acerca de la naturaleza de la invasión y ocupación de Irak por parte de EEUU. Estas cuestiones deben ser abordadas por los candidatos presidenciales y debatido seriamente en los Estados Unidos, y por supuesto en un Irak ocupado, donde parece que la población tiene poco o ningún papel en la determinación del futuro de su país.

A las negociaciones que se están llevando a cabo con Exxon Mobil, Shell, Total y BP, los socios originales desde hace varias décadas en la “Iraq Petroleum Company”, ahora se sumaron Chevron y otras compañías petroleras más pequeñas., con el objetivo de renovar la concesión del petróleo que perdieron durante los años de nacionalización en los cuales el país se hizo cargo de sus propios recursos.

Los contratos sin licitación, al parecer escritos por las empresas petroleras con la ayuda de funcionarios de EE.UU., prevaleció sobre las ofertas de más de 40 otras empresas, incluidas las empresas en China, India y Rusia.

“Había sospechas entre muchos en el mundo árabe y entre partes del público estadounidense que los Estados Unidos habían ido a la guerra en Irak, precisamente para garantizar la riqueza petrolera que estos contratos tratan de extraer” escribió Andrew E. Kramer en The New York Times .

La referencia de Kramer a la “sospecha” es un eufemismo. Por otra parte, es muy probable que la ocupación militar haya tomado la iniciativa en el restablecimiento de la odiada “Iraq Petroleum Compan”y, que, como Seamus Milne escribió en el diario “The Guardian” de Londres, “se impuso bajo el dominio británico.

Existen muchos informes que hablan de retrasos en la licitación. Es mucho lo que está sucediendo en secreto, y no sería ninguna sorpresa si surgen nuevos escándalos.

La demanda no podría ser más intensa. Irak poseee tal vez la segunda reserva de petróleo más grande del mundo, con la ventaja que es muy barato de extraer: no hay arenas alquitranadas o de perforación en aguas profundas. Para los planes de EE.UU., es imperativo que Irak permanezca bajo su control, y en la medida de lo posible, lo haga como un obediente estado que además permita albergar las principales bases militares de EE.UU., justo en el corazón de las principales reservas de energía del mundo.

Que estas son las principales metas de la invasión fue siempre lo suficientemente claro para verse a través de la bruma de los sucesivos pretextos: las armas de destrucción masiva, vínculos de Saddam con Al-Qaeda, la promoción de la democracia y la guerra contra el terrorismo, que, como se predijo, aumentó bruscamente como consecuencia de la invasión.

El pasado mes de noviembre, las preocupaciones principales se explicitaron cuando el presidente Bush y el Primer Ministro de Irak, Nouri Al Maliki firmaron una “Declaración de Principios,” ignorando al Congreso de los EE.UU, al parlamento iraquí, y los ciudadanos de ambos países.

Esta declaración deja abierta la posibilidad de que la presencia militar EE.UU. en Irak se extienda por un tiempo indefinido que presumiblemente incluirá las enorme bases aéreas ahora que se están construyendo en todo el país, y la “embajada” en Bagdad, una ciudad dentro de una ciudad, a diferencia de cualquier embajada en el mundo. Estas instalaciones no están siendo construidas para ser abandonadas.

La Declaración también contiene un descarado apartado sobre la explotación de los recursos de Irak. Según dice, la economía de Irak, es decir, sus recursos petroleros, debe estar abierta a la inversión extranjera, “especialmente las inversiones de Estados Unidos de América.” Esto es casi declarar públicamente que invadimos para poder controlar su país y tener acceso privilegiado a sus recursos.

La gravedad de este compromiso se puso de relieve en enero, cuando el presidente Bush emitió una “declaración de firma” declarando que iba a rechazar cualquier legislación del Congreso que limitara la financiación “para establecer cualquier instalación o base militar con el fin de proporcionar logística para una presencia permanente de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos en Irak “o” a Estados Unidos ejercer el control de los recursos petrolíferos de Irak.

No es de extrañar que la Declaración haya suscitado objeciones inmediatas en Irak, entre algunos de los sindicatos iraquíes, que sobreviven incluso con la dura legislación laboral que Saddam impuso y los mandos de la ocupación mantienen.

En la propaganda de Washington, la justificación de dominación de los EE.UU. sobre Irak es Irán. Por los problemas de EE.UU. problemas en Irak se culpa a Irán. La Secretaria de Estado, Condoleezza Rice, una solución sencilla: “las fuerzas extranjeras” y “extranjeros armados” deberían retirarse de Irak – Iran.

El enfrentamiento sobre el programa nuclear de Irán aumenta las tensiones. La política de la administración Bush hacia Irán, del “cambio de régimen” viene con ominosas amenazas de la fuerza (allí se unieron a Bush ambos candidatos presidenciales de EE.UU.). La mayoría del pueblo norteamericano está a favor de la diplomacia y se opone al uso de la fuerza. Pero la opinión pública es en gran medida irrelevante para la formulación de políticas, no sólo en este caso.

Una ironía es que Irak se está convirtiendo en un condominio Norteamericano-iraní. El gobierno Maliki es el sector de la sociedad iraquí más respaldado por Irán. El llamado ejército iraquí – sólo otra milicia – se formó en gran medida sobre la base de la Brigada Badr, que fue entrenada en Irán, y luchó por la parte iraní durante la guerra Irán-Irak.

Nir Rosen, uno de los más astutos y corresponsales muy conocedor de la región, señala que el objetivo principal de la alianza militar EE.UU.- es un personaje detestado por Iran: Moktada Al Sadr. Él es independiente y cuenta con el apoyo popular, por lo tanto es muy peligroso.

Irán “apoya claramente al Primer Ministro Maliki y al gobierno iraquí contra lo que calificaron como” grupos armados ilegales “(el ejercito de Moktada) en el reciente conflicto en Basora,” Rosen escribe, “lo cual no es sorprendente dado que su principal representante en Irak, El Supremo Consejo Islámico Iraquí domina el estado iraquí y Maliki es el principal proveedor de fondos. “
“No hay guerra en Iraqk, concluye Rosen, “porque los EE.UU. e Irán comparten el mismo objetivo.”

Es de suponer que Teherán ve con placer que Estados Unidos haya instituido y mantenga en Irak un gobierno receptivo a sus influencias. Para el pueblo iraquí, sin embargo, el gobierno sigue siendo un desastre, y muy probablemente lo peor aún está por venir.

En cuanto a las relaciones exteriores, Steven Simon señala que la actual estrategia de EE.UU. es “atizar las tres fuerzas que tradicionalmente han amenazado la estabilidad de los Estados del Oriente Medio: el tribalismo, el caudillismo y el sectarismo”. El resultado podría ser “un país fuerte, con un estado centralizado gobernado por una junta militar que se asemejan mucho al régimen de Saddam.”

Si Washington logra sus objetivos, entonces sus acciones serán justificadas. Las reacciones fueron muy diferentes cuando Vladimir Putin logró pacificar Chechenia, en un modo superior a lo que el General Gen David Petraeus ha logrado en Irak. Pero es que en esta situación eran ELLOS y en esta es EE.UU.
Los criterios son, por tanto, totalmente diferentes.

En los EE.UU., los demócratas están ahora en silencio debido al supuesto éxito de la oleada militar en Irak. Su silencio refleja el hecho de que no hay críticas de “principios” sobre la guerra. En esta forma de relacionarse con el mundo, si logras tus objetivos, la guerra y la ocupación son justificadas. El cariño de petróleo ofertas vienen con el territorio.

De hecho, toda la invasión es un crimen de guerra – además, el crimen internacional supremo, que difiere de otros crímenes de guerra en el sentido de que abarca todo el mal que sigue, en los términos de la sentencia de Nuremberg. Este es uno de los temas que no pueden ser discutidos, ni en la campaña presidencial ni en otros lugares. ¿Por qué estamos en Irak? ¿Qué le debemos los iraquíes por la destrucción de su país? La mayoría del pueblo norteamericano está a favor de la retirada de EE.UU. de Irak.

¿Sus voces importan?

La derecha también hace ciberactivismo


La derecha está viendo con preocupación el avance que los sectores progresistas están teniendo gracias a la utilización innovadora de los nuevos medios.

El crecimiento de organizaciones como Move On generaron un espacio de participación y debate nunca antes conocido en la historia.

El ejemplo de la campaña de Obama, es también un claro golpe para estos sectores acostumbrados a manejar la opinión pública a partir del manejo de los medios de comunicación masivos.

En respuesta a todo esto, nace The Vanguard, que se autodefine como “una comunidad en línea de estadounidenses que creen en valores conservadores, el libre mercado y el gobierno limitado como el mejor medio de llevar esperanza y cada vez más oportunidad a todos, especialmente a los más pobres entre nosotros. Su objetivo es promover políticas que rediseñarán a EE.UU. y al globo.”

The Vanguard describe sus políticas como “reaganista/thatcherista”.

El mensaje de su presidente dice: “Hoy enseñaremos a MoveOn, Hillary y a los medios de izquierda algunas lecciones que nunca se imaginaron.”

Aquellos que hablaban de la muerte de las ideologías, tendrán que explicar ahora como las diferencias de esta índole se dirimen en la arena de las redes sociales.

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Obama y su revolucionaria estrategia de recaudación de fondos

En post anteriores vine siguiendo el modo en que la campaña de Obama incorporaba herramientas de nuevas tecnologías como parte fundamental del cambio de paradigma que propone el político norteamericano.

En este punto de la contienda, no caben dudas, de la importancia que este nuevo modo de comunicarse y relacionarse con los ciudadanos tuvo para lograr el éxito en las elecciones internas de su partido y que además ya lo posicionan como el favorito de las encuestas para las elecciones generales.

Obama incluso se convirtió en el primer candidato en renunciar al sistema de financiación público. Prefirió recaudar fondos de muchos donantes que aportaran cantidades pequeñas de dinero. Para eso se enfocó en las redes sociales, con la ayuda de Chris Hughes, uno de los fundadores de Facebook, para lograr su objetivo.

En el cuadro que sigue que pueden descargar en PDF de XPLANED, se explica claramente y en pasos simples, el cambio hacia una nueva forma de hacer Política, que en posts anterior definíamos como Política 2.0.

Obama busca un millón de voluntarios vía Internet.


Todos los que trabajamos en Nuevas Tecnologías relacionadas a emprendimientos sociales miramos con interés las estrategias que los equipos de los candidatos a presidentes de Estados Unidos desarrollaron para estas internas.

Fuertes plataformas online que facilitan y promueven la participación de los ciudadanos buscando un mayor involucramiento con los candidatos.

Un buen ejemplo es el sitio de Barack Obama.

El sábado pasado (10/05/2008), Barack Obama lanzó desde su web “Vote for Change” (Votá por el cambio), una iniciativa sin precedentes que tiene lugar en 50 Estados. En este marco, se celebraron más de 100 eventos en el país del norte. En ellos, los voluntarios de Obama registraron nuevos votantes dando este primer paso de una estrategia que busca registrar la mayor cantidad de votantes posibles con vistas a las elecciones generales.

Desde el comienzo de la contienda Obama y su equipo buscaron generar una serie de herramientas online para permitir que más de un millón de donantes y voluntarios puedan persuadir directamente a sus vecinos a través de una variedad de medios de comunicación.

Por eso crearon, no creo que a esta altura los sorprenda, una social network. Los usuarios al registrarse pueden elegir el modo de participar.

Algunas de las opciones son:

• Crear o participar en eventos.

• Intercambiar correos con otros miembros del sitio.

• Crear una campaña de recaudación de fondos. (Fund Raising)

• Crear o participar de grupos de discusión.

• Inscribirse como voluntario.

• Hacer llamadas telefónicas a ciudadanos indecisos. (Curiosos y estudiosos del telemarketing pueden leer el script aquí pero primero tienen que registrarse al sitio)

• Publicar un blog.

Si resulta como lo planeó su equipo, el día de las elecciones Obama podría tener más de un millón voluntarios trabajando en pos de su triunfo. Más allá del resultado final, creo que este modo de encarar las campañas políticas ha llegado para quedarse y además sirve de ejemplo para organizaciones del tercer sector que estén interesados en ampliar su radio de acción.