Las vueltas de la vida: Don Luis cumplió 90 años

Don Luis Rodríguez, el entrañable calesitero de Ramón Falcón y Miralla, cumplió 90 años y lo celebró rodeado del cariño de todos sus vecinos. Más de trescientas personas de todas las edades se dieron cita al pié de su mítica calesita, tras la convocatoria realizada por los integrantes del grupo de Facebook “Yo fui a la calesita de Don Luis”, encargados de iniciar la movida.


Juegos, música, una torta de 90 kilos y vueltas de calesita gratis para todos los presentes le dieron forma a una tarde teñida por la emoción y la nostalgia, donde se le rindió homenaje a uno de los personajes más queribles del barrio de Liniers. “No sé cómo devolverles tanto afecto”, expresó emocionado Don Luis, artífice de la sana diversión de tres generaciones de vecinos.


Fuente: Cosas de Barrio


Don Luis


Flota en el aire una rara mezcla de alegría y nostalgia. Para muchos de los que estamos disfrutando de esta tarde de sol en la mítica calesita de Don Luis, todo remite al pasado. Los multicolores caballos de madera, el tocadiscos que se mantiene impávido y melodioso junto al poste de la sortija, y hasta el patio de la casa que alberga al viejo carrusel, parecen haberse quedado detenidos en el tiempo, confabulándose para extender una invitación permanente al recuerdo.


Sólo hay alguien que da muestras del tiempo transcurrido. El viejo y querido Don Luis, el mismo que desenfunda al aire sus 90 primaveras y regala besos y abrazos a todos y cada uno de los que se acercan a festejar su cumpleaños.


Son las 5 de la tarde del miércoles 4 de noviembre, y la tradicional esquina de Ramón Falcón y Miralla explota de gente. Más de 300 almas de todas las edades rodean la figura del joven anciano y le brindan su cariño, como queriendo devolverle a Don Luis al menos algo de toda esa magia que fue regalando a lo largo de sus 75 años de calesitero.


Ramón Falcón está cortada al tránsito, entonces el payaso Caramelo invita a tomarnos de la mano, y grandes y chicos giramos mancomunados entre el asfalto y la vereda, emulando aquella magia que mantiene vigente a la calesita, en tiempos de Hi-pod, celulares y DVD. Yo me aferro con la zurda a la mano de mi hija de 2 años y con la otra me entrelazo a una mano arrugada que transpira recuerdos. Mientras, Don Luis aprovecha para atender a los cronistas de la tele, que se han llegado hasta Liniers para conocer a “este tipo que se mantiene joven a fuerza de trabajar con pibes”. ¿No cualquiera puede desarrollar esta profesión, tiene muchas vueltas?, les desliza a los noteros a pura simpatía.


El Programa “Calesitas de Buenos Aires” del Ministerio de Cultura de la Ciudad, tiene todo listo para arrancar oficialmente los festejos, pero para Don Luis la fiesta empezó con el primer abrazo. Como puede se hace paso entre la multitud y se acerca al teclado que se ubica sobre la vereda, para escuchar con atención a Brian Zetta, un ex Don Luis boys devenido en músico, que le dedica una canción de su autoría, compuesta en sus años de pantalones cortos e ilusiones de sortija. Entre los aplausos y la emoción, chicos y grandes se le cuelgan de los hombros y él les devuelve su sonrisa franca. Se lo ve feliz. Está feliz.


Ahora una enorme torta de 90 kilos coronada por una calesita de cartón se adueña de la vereda y surgen espontáneos los acordes del feliz cumpleaños. Don Luis corta porciones y no quiere que nadie se quede sin su torta. Y allí están todos, hijos, padres y abuelos. Tres generaciones de linierenses que han girado con él y sueñan con seguir haciéndolo.


Los integrantes de la Asociación Argentina de Calesiteros y afines (que nuclean a las 45 calesitas que funcionan en la ciudad) le entregan una plaqueta en homenaje a su incesante labor. Don Luis es el símbolo de todos ellos, los mismos que celebran el Día del Calesitero cada vez que él sopla las velitas. “Soy miembro honorario de la asociación, por lo menos no me hacen pagar la cuota”, bromea mientras con una mano intenta cubrirse del sol.


Como una paradoja del destino, la feliz iniciativa de este encuentro con la nostalgia surgió de la mano de la tecnología. El grupo de la red social Facebook “Yo fui a la calesita de Don Luis” (compuesto por más de 1500 miembros) quiso homenajear en su día al artífice de muchas de sus sonrisas de la infancia. Luego el Ministerio de Cultura porteño recogió el guante y la fiesta se hizo realidad.


Mi hija me pide upa y antes que termine de alzarla se le cuelga del cuello al entrañable calesitero y a pura sonrisa le dice ¡feliz cumpleaños!.
Alegría y nostalgia ¿qué otra cosa es sino la calesita de Don Luis?


Presentación de Matt Cutts en PubCon


Esta es la presentación de Matt Cutts en la conferencia PubCon 2009.


En la misma cuenta un poco que ha estado haciendo Google durante el último tiempo.


Lo primero que se presentó fue Google Music OneBox 2.0, una aplicación para encontrar música, escucharlas y comprar más facilmente.


Le siguió una herramienta que aún está en etapa LABs llamada Google Squared que sirve para generar listas de elementos relacionados de la misma temática. Google nos da una prueba de las búsquedas semánticas. Sin embargo, por ahora solamente analiza correctamente la información en inglés, y las consultas que realizamos deberemos introducirlas en este idioma.


Acá pueden ver un ejemplo de un listado de “políticos argentinos” (en inglés) .


Así mismo, con los datos que editamos y creamos en “Google Squared” estos sistemas siguen aprendiendo a partir de nuevos campos que creamos para un determinado ‘square’, o nuevos ‘squares’ de términos que introducimos.


La empresa también está avanzando con las búsquedas en las redes sociales a través de su también experimental es Google Social Search.


Además recomendó otros servicios externos como Web Page Test, que sirve para analizar el desempeño de un sitio web determinado.


Acá pueden ver la presentación:







Foto desde el transbordador Atlantis

 

Atlantis


El transbordador espacial Atlantis se asoma sobre la tierra en esta imagen fotografiada por un miembro de la tripulación de la NASA.


El Atlantis llegó a la Estación Espacial Internacional el miércoles para una estancia de una semana, y los astronautas descargaron rápidamente una enorme plataforma llena de piezas de repuesto. (AP / NASA)

Futuro de Twitter: servicios pagos y expansión celular


Biz Stone, cofundador de Twitter confirmó en una entrevista con la BBC que su empresa comenzará a cobrar por algunos servicios adicionales.


Además dijo que lo primero que harán es crear cuentas comerciales, es decir, un área de acceso por suscripción para que los usuarios del servicio aprendan a aprovecharlo de una mejor manera.


Uno de los aspectos más importantes del futuro de esta red de microblogging es explotar aún más su segmento de desarrollo para celulares mediante el cual esperan llegar a 1000 millones de usuarios de Twitter dentro de un par de años.


Un futuro evitable


A semanas de la cumbre mundial en Copenhague, en la Argentina aún faltan políticas públicas integrales, apostar por las energías alternativas y mejorar la eficiencia energética. Lo que están haciendo las empresas y las ONG, y consejos prácticos para que todos puedan cuidar el planeta en su día a día.


Por Laura Rocha.

Fuente: La Nación

Deforestación


¿Crisis u oportunidad?


En esa dialéctica se debaten los expertos que estudian el fenómeno del aumento de la temperatura planetaria que provoca el calentamiento global. Si bien la información científica disponible da cuenta de la probabilidad de crecimientos en la frecuencia de fenómenos extremos -inundaciones en algunos puntos geográficos y prolongadas sequías en otras latitudes-, estos cambios pueden ser aprovechados si existe una política de Estado que se adapte a la nueva realidad. “La gente tiene que entender que el cambio climático es algo natural y tiene que ver con la evolución de la Tierra. Pero el problema es que la vida del hombre, sobre todo a partir de la Segunda Guerra Mundial, está en colisión con el sostenimiento del planeta. Este choque está haciendo que el hombre genere cambios que la naturaleza no soporta.


El problema no es el cambio, sino la velocidad del mismo”, explica Pablo Canziani, director del Programa de Estudios de Procesos Atmosféricos en el Cambio Global (Pepacg) de la Universidad Católica Argentina. “Va a existir un corrimiento de las fronteras agropecuarias”, asegura el experto. Es decir que donde hoy se siembra un cultivo, mañana quizá no habrá posibilidades por los cambios que traerá el clima. Y da un ejemplo: en Comodoro Rivadavia hoy se podrían cultivar vides.


A eso se suma el flagelo de la sobreexplotación. “Hoy tenemos zonas de la pampa húmeda que han perdido el 90% de los recursos naturales del suelo”, cuenta Canziani. El científico asegura, en ese sentido, que “el costo de la inacción es mucho mayor que el costo de la prevención”. Sin embargo, para que esto realmente llegue a suceder es necesario un esfuerzo global que consiga frenar el calentamiento de la Tierra en menos de 2°C. La urgencia de estas medidas se comprende si se toma en cuenta que, desde 1990, las temperaturas promedio se han elevado en 0,8°C. “Las medidas para revertir una crisis deben ser urgentes, siempre y cuando el cambio climático sea moderado”, afirma Canziani. Políticas insuficientes Respecto de las políticas adoptadas en el país hasta el momento, el científico no derrocha elogios: “Tenemos que empezar a trabajar de manera mancomunada con el Estado, con las empresas y el sector científico. Hay una postura desde el sector empresarial que tenemos que combatir. El desarrollo en la Argentina se hace sin ninguna participación del sistema científico”. Y da algunos ejemplos, como el escaso nivel de atención que le han prestado algunos sectores agropecuarios a los estudios del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) sobre el manejo del suelo, muchos de los cuales podrían haber prevenido las brutales sequías que hoy padecen varias provincias.


Tal como lo asegura el científico, es notable la poca actividad interdisciplinaria en el país en materia de cambio climático. Un reciente informe difundido por la Auditoría General de la Nación (AGN) da cuenta de que el área de Desarrollo Sustentable, que depende de la Secretaría de Ambiente de la Nación, no elabora planes que incluyan el uso de energías limpias. Según la AGN, “la variable energética prácticamente no está contemplada” en la subsecretaría, tanto que tampoco se hacen investigaciones para obtener nuevos combustibles de bajo impacto ambiental. El informe habla de la “necesidad de jerarquizar el tema”, porque hay oficinas casi sin empleados y programas que no se ejecutan por falta de financiamiento. En el desarrollo de los biocombustibles, Canziani dice que la Argentina tiene un potencial enorme; sin embargo, según su criterio, el enfoque es equivocado. “Se ha puesto un esfuerzo grande en el desarrollo de biocombustibles de primera generación (a partir de alimentos) que producen un gran impacto ambiental. Habría que poner el acento en los de segunda y tercera generación, que se consiguen en a base de sustancias no alimenticias y residuos.” Tal es el caso del biogás. “Hay un proyecto en Olavarría en donde se rescata biogás de un relleno sanitario y se inyecta en la red domiciliaria con un aporte interesante”, agrega.


Eficiencia energética


El otro tema central sobre el que habría que trabajar en el país para combatir el cambio climático es en la eficiencia energética. Ese es uno de los puntos centrales de la campaña que encabeza la Fundación Vida Silvestre Argentina, capítulo local de la Worldwide Wildlife Fund (WWF).


“Es vital que comencemos a pensar políticas que apunten a la buena utilización de los recursos naturales. Está muy bien la ley que obliga a cambiar las lámparas incandescentes por las de bajo consumo, pero no es suficiente”, indica Diego Moreno, director general de Vida Silvestre Argentina.


Estas iniciativas locales son fundamentales si se quiere conseguir buenos frutos de los acuerdos internacionales que pueden lograrse en materia de cambio climático. Aunque el panorama no es alentador para que en la ciudad de Copenhague, Dinamarca, los líderes mundiales sellen un acuerdo superador al Protocolo de Kyoto respecto de los compromisos para reducir gases de efecto invernadero, la Argentina debe comenzar a trabajar seriamente en el tema para tener un mejor punto de partida cuando los consensos se concreten.


El debate más áspero a nivel internacional se centra en la cantidad de dinero que deberán aportar los países desarrollados para transferir tecnología a los que están en vías de desarrollo. Ese Fondo de Mitigación y Adaptación al cambio climático debería alimentarse con dinero de los países desarrollados. Las cifras en discusión van de los 63.000 millones de dólares a los 100.000 millones anuales de 2013 a 2017.


Respecto de la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, la apuesta es superar lo previsto por el Protocolo de Kyoto, que vence en 2012, y cuyos parámetros ya no serán alcanzados. En ese sentido los países europeos se comprometen a reducir un 20% las emisiones respecto de 1990. Sin embargo, los Estados Unidos aún no se pronunciaron al respecto y los países africanos amenazan con boicotear la cumbre de Copenhague. “Es esencial que todos los países en desarrollo, que forman el G-77, como la Argentina, tengan acceso a la financiación mundial para la mitigación de gases de efecto invernadero y la adaptación a los impactos del cambio climático”, expresó Sarah Jones, directora de Programas Internacionales de FVSA.


Lento avance


Mientras tanto, el reemplazo de los combustibles fósiles por las energías renovables como la solar, la eólica, la geotérmica, la mareomotriz o la biomasa avanzan lentamente. La Agencia Internacional de la Energía (AIE) alertó que la demanda mundial de energía aumentará un 40% en 2030. La AIE asegura que “contener el cambio climático es posible”, pero que requerirá “una profunda transformación del sector de la energía”. Y propone que para 2030, el 37% de la electricidad mundial provenga de las energías renovables, que el 18% corresponda a la producción nuclear y que el carbono sólo represente el 5%.


Alfredo Esteves, investigador del Conicet de la Universidad de Mendoza y presidente de la Asociación Argentina de Energías Renovables y Ambiente, sostiene que la crisis energética que comenzó en 2001 se prolongó innecesariamente. “Hoy se debe recurrir a aumentos de tarifas (por eliminación de subsidios) para paliar los fondos que se precisan para cubrir lo necesario para la provisión de la energía”, dice.


El Gobierno lanzó el programa Generación de fuentes renovables (Genren), cuyo objetivo para 2016 es contar con el Sistema Interconectado Nacional con un abastecimiento de energía renovable equivalente al 8% de la demanda. Para conseguirlo, la estatal Enarsa licitará 1000 megavatios (MW) de energía renovable (en módulos de 50 MW) en contratos a 15 años. Además se reglamentó la ley 26.190 que establece incentivos fiscales, desgravaciones impositivas y remuneraciones diferenciales para las inversiones destinadas a la construcción de usinas. Sin embargo, esa cifra en ese plazo parece poco.


Fuentes del sector explican que 1000 MW es lo que la Argentina debería agregar al año con un crecimiento del 5% anual. Esa potencia serviría para abastecer a las ciudades de Córdoba y Carlos Paz. Para tener una idea, la central nuclear de Atucha genera 350 MW. En la actualidad la participación de las energías renovables en la matriz energética es del 5%. Y más del 80% de la torta lo ocupan combustibles fósiles como el gas y el carbón.


Hace dos meses, Greenpeace presentó el informe [R]evolución Energética en el que propone un 20% de participación de energías limpias en 2020, más de un 30% para 2030 y 60% para 2050. “Si tomamos el costo general, en la actualidad la Argentina está pagando 10.000 millones de dólares anuales para la generación de electricidad de todo el país. Este costo va a aumentar considerablemente: en 2030 será de 30.000 millones y de 60.000 millones para 2050. En el escenario alternativo, el costo va a aumentar a 30.000 millones de dólares, o sea la mitad de lo que va a aumentar en el escenario de referencia”, dijo el coordinador de la Unidad de Energía y Clima de Greenpeace Internacional, Sven Teske.


Ese modelo propone inversiones e incentivos para las nuevas tecnologías con inversiones anuales de 700 millones de dólares, sumados a aportes internacionales. Depende del cristal con el que se mire este nuevo escenario puede traducirse en crisis o en oportunidad. Es hora de decidir.